XICU PALLA, UN FORMENTERENSE DE PELÍCULA.

Història | diciembre 7, 2017

En 1961 se estrenó la superproducción Fanny, donde Xicu aparecía interpretándose a sí mismo.

Después de dar cuatro vueltas al mundo volvió a Formentera para patronear la lancha-ambulancia.

Texto: Josep Rubio | Fotografía: Próximo Ferry

Francesc Torres Juan, Xicu Palla (1929-2017), nació en Formentera el día del Carmen, la patrona de la mar, toda una premonición del devenir de sus incontables días de marinero. Una profesión que lo llevó a dar cuatro vueltas al mundo y, por una carambola insólita, lo convirtió en el primer formenterense en aparecer en una película de ficción. Concretamente ‘Fanny’ (1961) una superproducción de Hollywood rodada en Marsella y dirigida por Joshua Logan que estuvo nominada a los Oscars y un Globo de Oro y que fue estrenada en salas de Estados Unidos y Europa. Xicu hizo un breve papel de figurante: interpretándose a sí mismo, se le ve ayudando a los pasajeros a embarcar a través de la pasarela, recogiendo cabos y cargando velas.

La fugaz aparición de Xicu en la gran pantalla se explica porque desde 1955 estuvo enrolado en varios barcos de recreo, la mayoría con bandera francesa, con los que navegó por todos los mares del mundo. La base de operaciones del formenterense durante aquellas décadas fue Mónaco, Saint Tropez y otros lugares del litoral mediterráneo francés, precisamente donde se rodó el filme. Xicu estaba bien relacionado con los propietarios de grandes veleros, como el que aparece en el film, La Malaisie, por lo que es razonable pensar que fuera contratado para hacerlo navegar y mantenerlo durante el rodaje.

Según explica su hijo Andreu, entre otros trabajos, Xicu hizo de suboficial a bordo del Iduna, el lujoso barco que el rey Faruq de Egipto abandonó cuando huyó del país en 1952, a raíz del golpe de estado liderado por los militares entre los que destacaba el futuro líder del panarabismo, Gamal Abdel Nasser. Una vez proclamada la República, los bienes de la monarquía, desde coches europeos hasta costosas colecciones filatélicas, fueron vendidos y el barco del jefe de estado depuesto, también. El Iduna debía ser llevado desde el país del Nilo hacia Inglaterra y Xicu fue contratado para comandar la marinería. De camino a las islas británicas hizo escala en Mallorca, donde entonces vivía su familia. Andreu, que era un niño, visitó el barco acompañado de su padre y quedó impactado con la cabina del rey Faruq «donde todo era de oro y sobre la cama estaban las fotos de sus esposas … me parece que eran doce!».

La pasión por el mar de Xicu empezó muy pronto, cuando navegaba con su padre, a bordo del correo entre Formentera e Ibiza. Sólo en un breve periodo de unos «dos o tres años durante los 60», rememora Andreu, intentó establecerse en tierra firme montando un bar en la plaza Gomila de Palma, pero «aguantó poco» y acabó por hacerse de nuevo al mar. Incluso, cuando le quedaba poco para jubilarse y volvió a Formentera, en 1985, también trabajó en la mar. Primero a bordo de la mítica Joven Dolores y luego comandando durante 10 años la lancha-ambulancia que realizaba las evacuaciones hacia el Hospital de Ibiza, antes de que fuera sustituida por el helicóptero.

En 2006 recibió el premio Illes Pitiüses, concedido por Diario de Ibiza a propuesta del Ayuntamiento de Formentera, por haber llevado el nombre de la isla por todo el mundo. Ironías de la vida, cuando ya esperaba retirarse a su isla natal y disfrutar del mar yendo a pescar, una enfermedad reumática lo obligó a vivir tierra adentro, lejos del ambiente húmedo, y pasó los últimos años de vida en Ávila.